16.3.11

palabras de infancia

La felicidad terminó cuando el cielo no fue de los pájaros, sino de los aviones, cuando el agua no fue de los peces sino de los barcos y los pescadores, terminó cuando la tierra no fue de los animales, sino del intruso más sádico, el hombre. Fue el último en aparecer, el último en poner los pies sobre la tierra, y el primero en dar las órdenes.
                                                                                                Ana, 23-2-89